El portavoz del PRC prioriza la instalación de marquesinas, el aumento de frecuencias en la periferia, la conexión Norte-Sur y la recarga digital de la tarjeta monedero
Santander, 4 de julio de 2024
El portavoz municipal del PRC de Santander, Felipe Piña, ha cuestionado hoy la eficacia del aumento del coste del nuevo contrato para la concesión del servicio complementario del Transporte Urbano de Santander (TUS), que se ha licitado por 14,4 millones de euros y una duración de cuatro años más otro prorrogable, “mientras no se cumplen las necesidades básicas del servicio”.
Con estas palabras, el también consejero del TUS, se ha referido a la ausencia de marquesinas en muchas paradas, las pocas frecuencias que conectan Cueto, Monte, San Román y Peñacastillo con el centro de la ciudad, “y que en algunas líneas llegan a la hora entre autobús y autobús”, así como la nula conexión Norte-Sur y la falta de aceras que favorezcan el acceso a las paradas.
También se ha referido a las dificultades que tienen los usuarios para recargar las tarjetas monedero, “provocada por las pocas facilidades que el Ayuntamiento proporciona a los comerciantes que las venden”, y ha vuelto a insistir en la necesidad de habilitar la opción de recarga digital a través de la aplicación móvil y web, tal y como ya existe en otras ciudades españolas.
En un comunicado, Piña ha lamentado que con esta licitación “se mantenga la misma situación que hasta ahora y no se apueste por mejorar el servicio, a pesar de que el coste para los bolsillos de los santanderinos será mayor”.
En concreto, la empresa que se haga con este contrato, que hasta ahora tenían un coste de 2,2 millones de euros al año y que pasará a suponer un desembolso de 2,88 millones de euros anuales para las arcas municipales, se ocupará de gestionar varias de las líneas regulares (L18, L22) y los servicios nocturnos (N1, N2 y N3).
Asimismo, Piña ha recordado que el presupuesto que maneja este año el Consistorio para gestionar el servicio municipal de autobuses es de 27,4 millones de euros, de los que más de 16 millones de euros son gastos “que no se reflejan en la calidad del servicio”.
En este sentido, el regionalista se ha preguntado cómo es posible que el servicio de transporte regular de del Gobierno regional funcione sin llegar a superar los 2 millones de euros al año y en la capital, “con un importe muy superior”, haya tantas deficiencias y quejas por parte de los usuarios.